El programa Secanos Vivos para el emprendimiento sostenible que estamos gestionando desde Tangente, está en pleno desarrollo de su segunda fase: el acompañamiento personalizado a las doce iniciativas que forman parte de ‘Aprendo y emprendo en el medio rural’.
En este ciclo, que se prolongará hasta el mes de septiembre, las personas emprendedoras dispondrán de asesorías colectivas, mentorías y tutorías individuales que les permitirán avanzar en aspectos específicos de su proyecto de emprendimiento. Previamente, entre los meses de febrero y mayo, las y los emprendedores recibieron formación online sobre materias como competencias emprendedoras, mirada bioterritorial, comercialización, comunicación, plan financiero o gobernanza, entre otras.
De los doce proyectos que recibirán el acompañamiento, cinco están localizados en Castilla-La Mancha (Valdepeñas, Albares, San Lorenzo de la Parrilla, Pozuelo de Calatrava y El Provencio), dos en Castilla y León (Burgos, Medina de Pomar y Merindad de Cuesta Urrea) y dos en Andalucía (Cuevas del Becerro y Campillos). Comunidad Valenciana (Camporrobles), La Rioja (Berceo) y Aragón (Mozota) son las otras tres comunidades -con una iniciativa emprendedora en cada una de ellas- que forman parte de ‘Aprendo y emprendo en el medio rural’. Estos proyectos respaldados por Secanos Vivos fomentarán oportunidades de empleo sostenible en estos pueblos, contribuyendo también a fijar su población.
Propuestas diversas
Entre las ideas emprendedoras, hay cinco propuestas para la producción y transformación de alimentos como quesos artesanos en Albares (Guadalajara); cultivo de cereal para la elaboración de harinas, panes y repostería en San Lorenzo de la Parrilla (Cuenca); recuperación de variedades locales de cereal para su cultivo y transformación en Cuevas del Becerro (Málaga); elaboración de productos a partir de pistacho ecológico (patés, pesto, etc.) en Pozuelo de Calatrava (Ciudad Real), y una finca vitivinícola que acogerá voluntariado ambiental en El Provencio (Cuenca).
En el ámbito de la formación, se benefician dos iniciativas: una escuela de cocina experimental en Campillos (Málaga) y una finca agraria con espacios demostrativos para el aprendizaje y la sensibilización ambiental en Valdepeñas (Ciudad Real).
En el sector cultural y medioambiental, en Mozota (Zaragoza) se desarrollará un proyecto de gestión de eventos culturales y dinamización en el medio rural, así como los destinados a la recuperación de la biodiversidad incorporando la actividad ganadera de pastoreo rotativo en Medina de Pomar y Merindad de Cuesta Urrea (Burgos) y la educación ambiental dirigida a colegios en la ciudad de Burgos.
Por último, en cuanto al sector servicios, en Camporrobles (Valencia) destaca una propuesta sobre jardinería y decoración floral adaptada a las condiciones climáticas y en Berceo (La Rioja), la puesta en marcha de un marketplace (plataforma virtual que sirve de intermediaria entre vendedores y clientes) especializado en facilitar servicios en comunidades rurales.
Proyecto con aval científico
Secanos Vivos es una transferencia del proyecto LIFE Olivares Vivos (forma parte de su plan PostLIFE 2015-2021) y algunas de estas medidas agroambientales ya han sido aplicadas en el mismo, obteniendo excelentes resultados tanto en la recuperación de la biodiversidad, el ahorro de costes, así como en la valoración positiva del consumidor hacia los AOVE (Aceite de oliva virgen extra) certificados por el proyecto, sumado a una gran acogida por parte de los agricultores por la mejora en la rentabilidad.
Coordinado por SEO/BirdLife, con el apoyo de la Fundación Biodiversidad, Secanos Vivos arrancó en enero de 2023 y tiene por objeto implementar medidas avaladas por la ciencia para impulsar la vida silvestre y la adaptación al cambio climático en cultivos de secano de cereal y vid en fincas de Andalucía, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y Aragón, aportando así un valor añadido a estos productos y avanzando hacia agrosistemas de secano extensivos, biodiversos y rentables.
La iniciativa aportará un valor añadido a las materias primas y alimentos derivados de la uva y el cereal, logrando otro de los grandes objetivos del proyecto: transformar la biodiversidad en rentabilidad para la agricultura. Para ello, estos alimentos sanos, sostenibles y de calidad contarán con un sello específico, una marca que ayudará al consumidor a distinguir los productos que han contribuido a recuperar biodiversidad y la resiliencia climática, siguiendo un método avalado científicamente.
Un nuevo impulso, además, para generar oportunidades de empleo sostenible en los pueblos, contribuyendo a fijar población en algunas de las zonas del interior peninsular más despobladas.
El proyecto Secanos Vivos, cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.