“Solo no puedes, con amigos sí” podría resumir, en palabras del socio de Tangente Mikel Fernández, la filosofía, el objetivo y la metodología de los encuentros de Networking (o Trabajo en Red) que el grupo cooperativo está realizando este otoño en el Centro de Emprendedores de la Comunidad de Madrid. “Se trata de sesiones donde se comparten ideas, recursos, contactos. Donde se conocen a otras personas que como tú están emprendiendo, se aprende de ellas y de sus ideas”.
Esta es la mirada desde donde Tangente fomenta el emprendimiento: en clave cooperativa. Por eso, para Mikel Fernandez, co-coordinador de este proyecto subvencionado con Fondos Europeos, “para aumentar las posibilidades de éxito de una aventura emprendedora, es conveniente rodearse de una red de contactos profesionales”. Es una clave que permite sortear con éxito los problemas derivados de la actividad empresaria y mejorar la capacidad de los servicios.
Este otoño se han realizado ya cuatro Networkings y todavía queda por realizarse un encuentro más, con una participación media en cada sesión de cuarenta personas provenientes de diferentes puntos de la comunidad de Madrid. En los encuentros las personas emprendedoras reciben claves de cómo funciona y cómo poner en práctica el trabajo en red. Pero sobre todo, la sesiones se convierten en sí mismas en espacios para poner en práctica el networking donde, según Mikel Fenández, “la actitud más provechosa no viene de lo que uno se lleva sino de los que puede aportar a otras personas”.
La comunicación (entendida como la manera para presentar y comunicar una idea de negocio), constituye un elemento fundamental en los encuentros. Irene García, socia de Tangente, es quien dinamiza estos contenidos en las sesiones, contenidos que en sus palabras, “deben tomarse como algo central en cualquier proyecto emprendedor”. Para esta comunicadora social, “hoy en día, como hay tantos proyectos emprendedores e iniciativas, tienes que ser capaz de contar lo que haces y los servicios que tienes pero sobre todo qué es lo que diferencia a tu proyecto, cuál es la novedad que tú aportas”.
A la hora de comunicar el valor diferencial de un negocio, el mensaje tiene una importancia crucial. “No se trata sólo de ofrecer información sobre el proyecto, sino de causar impacto. Transmitir entusiasmo, captar el interés de la gente”. El cómo se hace eso es cuestión de formación y de práctica. Por eso, en las sesiones de networking, las personas participantes también tienen la oportunidad de, a partir de las claves teóricas, poder presentar su proyecto a las decenas emprendedores y emprendedoras con las que comparten espacio.