Tras un periodo en el que las participantes sólo se han estado viendo de forma virtual, la presencialidad va ahora cogiendo peso para atender las diferentes necesidades que tiene el grupo. Al igual que en la edición anterior, seguimos trabajando con mujeres mayores de 65 años, por lo que la virtualidad ha sido todo un reto que hemos conseguido solucionar gracias a la atención personalizada y telefónica, y a la dotación de tablets para algunas de las participantes con el fin de salvar todos los obstáculos.

Durante estas sesiones online hemos trabajado cuestiones que nos aportan bienestar, relajación y meditación, recuerdos que nos hacen sentir bien; también sobre miedos, resiliencia… En otras ocasiones, hemos derivado a los diferentes recursos públicos.

Además, desde «Ventanas» nos estamos vinculando con el resto de iniciativas de los barrio como el «mapeando Arganzuela», junto con el CMS, Grandes Amigos y CDU, entre otros; así como otras actividades, actuando como intermediarias para facilitar el acceso de las mujeres mayores a los recursos y eventos del distrito.